Lista
Cronológica de los Papas
EnciCato
La lista histórica de los papas, desde el siglo dos hasta el siglo presente,
constituye en sí misma un cuerpo considerable de literatura. La discusión sobre
éstos catálogos está fuera del alcance de este artículo. Se puede consultar el
artículo LIBER PONTIFICALIS que contiene información sobre los papas más
famosos. Sin embargo, es propicio indicar de manera breve que son nuestras
autoridades, sus nombres y la duración en el oficio de los papas de los dos
primeros siglos de la existencia de la Iglesia.
San Ireneo, escribiendo entre el 175 y 190, no muchos años después de su
permanencia en Roma, enumera la serie desde Pedro hasta Eleuterio (Adv. Haer.
3:3:3; Eusebius, "Hist. eccl." 5:6). Su objetivo, como ya hemos visto, era
establecer la ortodoxia de la doctrina tradicional, como oposición a las
novedades heréticas, mostrando que el obispo era el heredero natural de las
enseñanzas apostólicas. En su lista aparecen sólo los nombres, no la duración de
los diferentes episcopados. Esta carencia es suplida por otros testigos. La
evidencia más importante es suministrada por el documento titulado “Catálogo
Liberiano” – así llamado por el nombre del Papa que finaliza la lista. La
colección de artículos de la que éste forma parte fue editada (aparentemente por
un tal Furius Dionysius Philocalus) en el 354. El catálogo consiste de una lista
de los obispos Romanos desde Pedro hasta Liberio, con la duración de sus
respectivos episcopados, las fechas consulares, el nombre del emperador
reinante, y en muchos casos otros detalles. Existen fuertes evidencias para
creer que la parte más antigua del catálogo, hasta Pontiano (230-35), es obra de
Hipólito de Porto. Se manifiesta que hasta este punto, el recopilador del siglo
cuarto estaba haciendo uso de una autoridad diferente de la que emplea para los
Papas subsiguientes: y hay evidencia evocando casi con certeza que “Crónica”, la
obra de Hipólito contenía una lista similar. Además, el reinado de Pontiano
sería el punto en el cual se habría detenido la lista: ya que Hipólito y él
fueron condenados a la servidumbre en las minas Sardinianas -- hecho del que
hace mención el cronógrafo cuando habla del episcopado de Pontiano. Lightfoot ha
argumentado que esta lista originalmente contenía nada más que los nombres de
los obispos y la duración de sus episcopados, las notas restantes fueron
adicionadas por alguien tiempo después. Esta lista de Papas es idéntica a la de
Ireneo, salvo que Anacleto se duplica en Anacleto y Cleto, mientras que Clemente
aparece antes, en vez de después de estos dos nombres. El orden de los Papas Pío
y Aniceto también ha sido intercambiado. Hay varias razones para considerar a
estas diferencias como errores de los copistas. Otro testigo es Eusebio. Los
nombres y años de episcopado de los obispos pueden ser reunidos de su “Historia”
y sus “Crónicas”. Las observaciones en los dos trabajos; pueden ser mostradas
para llegar a un acuerdo, sin importar ciertas corrupciones en muchos textos de
las “Crónicas”. Esta lista oriental en manos de Eusebio es vista como idéntica a
la lista occidental de Hipólito, excepto que en la lista del este el nombre del
sucesor de Lino parece figurar como Anacleto, y en la lista original de
occidente como Cleto. Las dos autoridades proponen la siguiente lista: (1)
Pedro, XXV; (2) Lino, XII; (3) Anacleto [Cleto], XII; (4) Clemente, IX; (5)
Evaristo, VIII; (6) Alejandro, X; (7) Sixto, X; (8) Telésforo, XI; (9) Higinio,
IV; (10) Pío, XV; (11) Aniceto, XI; (12) Sotero, VIII; (13) Eleuterio, XV; (14)
Víctor, X; (15) Ceferino, XVIII; (16) Calixto, V; (17) Urbano, VIII; (18)
Pontiano, V (“Cronología” de Harnack, I, 152).
Sabemos por Eusebio (Hist. eccl. 4:22) que a mediados del siglo segundo,
Hegesipo, el Cristiano Hebreo, visitó Roma y dibujó una lista de obispos hasta
Aniceto, el que fuese luego Papa. Eusebio no cita su catálogo, pero Lightfoot ve
razones suficientes para afirmar que lo podemos encontrar en un pasaje de
Epifanio (Haer. 27:6), en el cual los Obispos hasta Aniceto son enumerados. Esta
lista de Hegesipo, escrita menos de un siglo después del martirio de San Pedro,
era desde su punto de vista la fundación como la de los catálogos de Eusebio e
Hipólito (Clemente I de Roma, 325 so.) Su punto de vista ha sido aceptado por
muchos literatos. Incluso aquellos que, como Harnack (Cronología, I, 184 sq.),
no admiten que esa sea la lista de Hegesipo, la reconocen como un catálogo del
origen Romano y de fecha muy antigua, dando un testimonio independiente al igual
que las listas Eusebiana y Liberiana.
La “Liber Pontificalis”, largamente aceptada como una autoridad del mayor nivel,
es ahora reconocida como compuesta al principio del siglo V, y como manifestaron
los antiguos Papas, dependiente del “Catálogo Liberiano”.
En la numeración de los sucesores de San Pedro, aparecen ciertas diferencias en
distintas listas. Las dos formas, Anacleto y Cleto, antiguamente ocasionaron que
el tercer Papa sea considerado dos veces. Existen algunos pocos casos, en los
que todavía se duda si algunos individuos pueden ser considerados como
verdaderos Papas o intrusos, y de acuerdo al punto de vista tomado por el
recopilador de la lista, ellos serían incluidos o excluidos. En la lista
adicional el Estéban que sigue inmediatamente después de Zacarías (752) no está
numerado, ya que, aunque debidamente electo, murió antes de su consagración. En
aquél tiempo se sostenía que la dignidad papal era otorgada en su consagración,
de ahí su exclusión de las listas más antiguas. León VIII (963) está incluido,
así como la reasignación de Benedicto V, aunque impuesta, puede haber sido
genuina. Bonifacio VII está también presente como Papa, ya que, en el 984 por lo
menos, parece haber sido aceptado como tal por la Iglesia Romana. El pedido de
Benedicto X (1058) es también reconocido. No se puede afirmar con certeza que
este título es inválido, y su nombre, aunque algunas veces excluido, aparece en
los catálogos más antiguos. Se debe observar que no existe ningún Juan XX en el
catálogo. Esto se debe al hecho que, en la “Liber Pontificalis”, se dan dos
fechas en conexión con la vida de Juan XIV (983). Esto introdujo la confusión en
algunos de los catálogos papales, y un Papa distinto fue asignado a cada una de
estas fechas. Además, tres papas llamados Juan fueron adicionados entre
Benedicto VII y Gregorio V. El error llevó a que el Papa del siglo XIII quien
debió llamarse Juan XX, escogiera el nombre de Juan XXI (Duchesne, "Lib. Pont."
2:17). Sólo algunos de los antipapas son mencionados en la lista. No existe
razón para nombrar a cada uno de aquellos pretensores. Muchos ellos no poseen
ningún tipo de importancia histórica. Desde Gregorio VII en adelante, no se
asignan solamente los años, sino los precisos días en lo que los gobiernos
respectivos comenzaron y terminaron. Las autoridades antiguas también guardaron
estos detalles para la mayoría de los papas siguientes, pero, antes de la mitad
del siglo XI, la información no es tan confiable.
Con Gregorio VIII ingresó un nuevo método de cómputo. La dignidad papal era
reconocida desde la elección, y no como antes desde la coronación, y el inicio
de su gobierno era considerado desde el día de la elección. Este punto es
conveniente para ingresar las indicaciones más detalladas.
Para la lista completa de los hombres que han desempeñado este oficio, vea LISTA
DE LOS PAPAS.
G.H. JOYCE
Transcrito por Gerard Haffner
Traducido por Alonso Teullet